Consulta Inicial
La primera consulta se compone de 3 bloques distintos:
1. Estudio antropométrico
Este estudio se basa en el análisis de la composición corporal. A través de una báscula de impedancia bioeléctrica se determina el porcentaje y distribución de la grasa, la cantidad y distribución de músculo, la grasa visceral, la complexión física y una aproximación al metabolismo basal. Es un método rápido y no invasivo, que no produce ningún tipo de dolor ni molestia al cliente. Se basa en la resistencia eléctrica (impedancia) del cuerpo humano al paso de una corriente de muy baja intensidad a través de electrodos (pies y manos).
2. Estudio nutricional
Se empieza con un análisis del estilo de vida del cliente (con la información aportada en los cuestionarios nutricionales). Luego se dispone a aproximar la ingesta diaria al metabolismo basal + la parte proporcional que se estime de gasto calórico diario.
Se distribuyen las calorías a lo largo del día según preferencia y horario del cliente, siempre siguiendo unas mínimas pautas de distribución. También se establece una comida pre-entreno y una comida post-entreno en caso de que sea necesario.
Se estipula la cantidad de gramos de proteína por kilo de peso y la cantidad de gramos de grasa por kilo de peso que se debe consumir diariamente (dependiendo del objetivo del cliente)
A partir de aquí se buscan aquellos alimentos que el cliente prefiera consumir según gustos, facilidad de compra o preparación, precio, intolerancias (gluten, lactosa, parabenos, aditivos…), alergias (frutos secos, pieles de frutas…), restricciones (vegetarianos, veganos, lacto-vegetarianos, crudívoros…), enfermedades (diabéticos) o religiones (kosher, halal…),… A partir de aquí se buscan aquellos alimentos que el cliente prefiera consumir según gustos, facilidad de compra o preparación, precio,… y se establecen 5 menús completos. Estos menús se elaboran con la colaboración del cliente, que es quien propone los alimentos que quiere consumir, cuando, cómo y combinados con qué. Se intenta ajustar las preferencias del cliente al máximo, siempre partiendo de la base que algunos alimentos deberán ser limitados y otros no podrán consumirse.
